Los siete cabos de un velero clásico

Los cabos de barco que se utilizan al navegar se denominan escotas o cuerdas, y cada escota hace referencia a la vela que controla. Por ejemplo, cuando regulas la vela mayor, utilizas la escota de mayor. En este sentido, hay otros cabos que se utilizan para regular las velas, como el cunningham o el kicker. En el mundo de los barcos y la vela, cabo es simplemente el término que se da a la materia prima utilizada para fabricar cuerdas, siendo nada más que una cuerda que contribuye de algún modo al buen funcionamiento y la navegación del yate.

Entonces, ¿por qué parece tan difícil de entender? La complejidad surge del hecho de que hay  más de cien cabos en los veleros clásicos y más grandes. De hecho, algunos de esos ni siquiera llevan la palabra «cabo» en el nombre.

Estas son algunas de las categorías que podemos encontrar en los veleros clásicos: drizas, escotas, cabos de trinque, urdimbres, chicotes y burdas. Estas mismas categorías esconden otros muchos títulos que dejan más clara la función que realizan, como driza de foque, driza de pico o las drizas de arriado, entre otras.

A continuación veremos siete tipos de cabos de barco que podemos encontrar en los veleros clásicos:

La cuerda de campana

La cuerda más común en un barco es la cuerda de la campana. Su función principal es golpear el badajo, una pieza metálica, contra el lateral de la campana, produciendo el sonido característico.

La cuerda de perno

El siguiente cabo más utilizado es el cabo de perno. Este cabo está oculto en la parte delantera de la vela de proa, ya que está cubierto por un pliegue de lona. Su función principal es crear un borde de ataque recto y tenso en la vela. Esto es especialmente importante cuando se trata de una vela que no está montada sobre un estay. El nombre «cuerda de perno» hace referencia al hecho de que la lona de la vela se pliega sobre esta cuerda, creando un pliegue de tejido conocido como «perno».

El cabo de remolque

El cabo de remolque, también es otro cabo importante en un barco. Aunque se espera que no se necesite con frecuencia, su propósito es remolcar otra embarcación cuando sea necesario. Los cabos de remolque cortos corren el riesgo de romperse si se someten a una tensión excesiva. Por lo tanto, es preferible utilizar un cabo de barco más largo, ya que proporciona más elasticidad y garantiza un remolque más suave tanto para la embarcación remolcadora como para la remolcada.

La relinga inferior

La relinga inferior es un cabo de barco que se coloca debajo de los brazos de una verga en el mástil. Su función es proporcionar un lugar donde los marineros puedan colocar los pies mientras trabajan en altura y enrollan las velas. Caminando o de pie sobre la relinga inferior, los marineros pueden mantener el equilibrio y realizar sus tareas con mayor seguridad y eficacia.

Estrobos

Los estrobos hacen referencia a dos cuerdas que se dejan caer a cada lado de una escalera de cuerda que es característica en los veleros clásicos más grandes. Estas cuerdas auxiliares generalmente ayudan a las personas a subir y bajar de un buque, especialmente a los prácticos y otros visitantes. Al proporcionar un agarre adicional y un apoyo estable, estas facilitan los movimientos seguros a través de la escalera de cuerda.

Cabo superior

La relinga o cabo superior se utiliza para izar las velas superiores, como la gavia o el mastelero. Este cabo se emplea para izar y asegurar las velas en la parte superior del mástil, además de ser crucial para garantizar que las velas se desplieguen correctamente y permanezcan tensas durante la navegación.

Cabo de escora

El cabo de escora se utiliza para arriar las velas superiores, como la gavia o el mastelero. Este cabo permite el descenso controlado de las velas, garantizando un manejo seguro y ordenado durante el proceso de enrollado. Al soltar y bajar el cabo de escora, las velas se pliegan de forma controlada, evitando movimientos bruscos o daños a la embarcación.

Estos son los siete cabos de barco principales que se encuentran en un velero clásico. No todos los barcos los tienen, y es poco común verlos todos juntos. Sin embargo, cada uno de ellos desempeña un papel fundamental en el manejo de las velas y en el funcionamiento general de la embarcación. Al comprender su función y ubicación, los navegantes pueden comunicarse con precisión y trabajar con eficacia en la navegación y el mantenimiento del velero clásico.